Phoenix, un tributo

martes, 18 de agosto de 2009

Cometas, ¿fuentes de vida?


Mucho se ha hablado sobre los cometas, esas bolas de nieve sucias, que al paso de las cercanías de la Tierra nos enseñan esas colas de materiales y gases que se funden al acercarse al Sol. Y en los últimos tiempos se especulaba sobre ellos como los iniciadores de la vida en la Tierra. Por ese motivo, la NASA preparó y lanzó una sonda preparada para recoger muestras de la cola de un cometa. Se trata de Stardust. En el año 2004 se aproximó y entró en la cola del cometa Wild 2, y consiguió exitosamente recoger muchas muestras de la cola del Wild 2. Y en el 2006 su preciada carga regresó a la Tierra, donde los científicos, impacientes, esperaban este regalo del cielo.

Llevan 3 años estudiando esos pequeños fragmentos, muchas cosas han encontrado, pero hace poco un descubrimiento muy importante podría confirmar que los cometas fueron los que alimentaron de vida nuestro planeta. Han hallado glicina, un aminoácido muy importante para los seres vivos, ya que es utilizada por los seres vivos para formar proteínas. Cuando se detectó en los análisis previos, pensaban que estaba allí por contaminacion terrestre, pero un estudio en profundidad ha visto que no es para nada terrestre, y que proviene del cometa.

Está por confirmar que los cometas posean otras moléculas orgánicas, pero esta es una pista que abre la posibilidad de que nosotros mismos somos extraterrestres. Quizás no introdujeron todos los ingredientes, pero puede que colaboraran enormemente en la aparición de la vida en nuestro planeta. Toda historia tiene un comienzo, y ésta puede ser bastante larga.

miércoles, 12 de agosto de 2009

Colisión exoplanetaria


Mucho se supone sobre la creación de la Luna, y una de las teorías es la de que un objeto enorme colisionó con nuestro planeta hace miles de millones de años. Pero un hecho curioso ha sucedido, y es que se ha podido detectar, que no ver, una colisión entre dos objetos, o mejor dicho, dos planetas tipo terrestre. En la estrella HD172555, localizada a 100 años luz, se ha detectado lo que podría calificarse de la nube de escombros de dos cuerpos, uno algo más grande que Mercurio, que aún está ahí, y el segundo, ahora destrozado, una pizca más grande que nuestra Luna. Y todo gracias al telescopio Spitzer, que ha detectado todo esto gracias al infrarrojo que es capaz de detectar.

Pero en el plano extrasolar, hay que decir que gracias a los nuevos medios, (incluyendo el nuevo telescopio hace poco inaugurado en Canarias) se van encontrando nuevos planetas, no cada día, pero en un ritmo de tal vez dos o tres al més, aunque casi ninguno es tipo terrestre, la mayoría son gaseosos, mucho más grandes que Júpiter, y muy cerca de sus estrellas. Aunque algún terrestre, o que se cree de este tipo, ha sido encontrado, y uno de ellos, situado en Gliese 581, una estrella parecida al Sol, hay un planeta que tal vez reuna alguna de las condiciones conocidas para la vida. Pero asegurarlo es más complicado.

Y como dato friki, decir que mientras se preparan telescopios para encontrar planetas no solo tipo terrestre, sino que tipo Tierra (ya hay uno, Kepler), los científicos piensan que podrían encontrar un planeta habitable en la estrella 40 Eridani A. ¿Por qué friki?: porque para los que nos guste Star Trek, todos, o casi todos, sabemos que allí está situado Vulcano.

No estaría mal encontrarlo...